miércoles, 14 de diciembre de 2011

Descubriendo una ciudad entre los Alpes. Lucerna. Suiza.
















Lucerna situada a los pies de magnífica montañas de más de tres mil metros y a orillas de un lago con su mismo nombre es una ciudad preciosa.

Las aguas del lago se ven surcadas por barcos de recreo, en un marco de aguas apacibles y verdeantes montañas, al lado de la vieja ciudad, de notables edificios que muestran historia, buen gusto y calidad de vida.

El agua es un elemento clave en el encanto de la ciudad. Lucerna surgió en torno al extremo del lago, donde se vierten las aguas al Reuss, afluente del Rin. Uniendo a ambos lados de la ribera, los puentes medievales son un atractivo para los turistas.

Sus calles son acogedoras y con mucho atractuvo para el turista, con edificios adornados de bonitas pinturas. Y en lo alto de la ciudad vieja encontramos las viejas torres defensivas constatando que en este rincón suizo hubo una densa historia

Las bellezas naturales són legión en esta bella ciudad, con asombrosas montañas con nieve perpétua en sus picos y el imparable trasiego del agua en las fuentes y las enbarcaciones en el Lago.

En el plano artístico, la ciudad vieja y la nueva resultan sumamente agradables; no sólo por sus monumentos civiles y religiosos, sino por las poderosas casas de la burguesía local, y los excelentes centros museísticos.

El puente de la Capilla es el más largo de los dos. Tiene más de 200 metros de longitud y es originario del siglo XIV, aunque en agosto de 1993 hubo un incendio que lo destruyo en gran parte. Se reconstruyó rápidamente y ya va adquiriendo la pátina del tiempo.En el centro del Kapelburcke, o puente de La Capilla, se halla la Wasserturm o torre del agua, uno de los símbolos de la ciudad.

Sobre todo en el margen norte de la ribera del Reuss hay una serie de plazas llenas de encanto, en el trayecto que va desde el puente de los molinos al lago.

No hay comentarios: